Es uno de los términos más recurrentes en los resultados e informes de las resonancias magnéticas cerebrales, pero ¿cuál es su significado? ¿Por qué es importante entender qué significa esta palabra?
La transmisión de las señales nerviosas que comunican al cerebro con todos los órganos y con el mundo exterior se realiza a través de distintos tipos de fibras. Estas fibras o nervios son, en realidad, manojos de prolongaciones (axones) de las células nerviosas (neuronas).
También puedes leer: Vitamina D y esclerosis múltiple: ¿una relación tóxica?
En el sistema nervioso central, los nervios están recubiertos por una capa grasosa, llamada “mielina”, que es fabricada por células especiales, conocidas como “oligodendrocitos”. Como si fuera el plástico aislante que recubre a los cables eléctricos, la vaina de mielina actúa como un elemento protector de los nervios, pero también cumple otras funciones. La principal es mejorar la transmisión de los impulsos que llevan órdenes de un lado a otro del cuerpo, aumentando la velocidad con la que viajan las señales nerviosas unas cien veces.
La mielina es esencial para que el cerebro logre que un músculo se mueva o el organismo perciba el dolor de una herida. En la esclerosis múltiple, sin embargo, la mielina es objeto del ataque del propio sistema inmunitario del organismo. Como resultado de la inflamación que provoca el sistema defensivo, la mielina se daña y las fibras del nervio quedan expuestas. Estas son las lesiones típicas –las múltiples escaras- que se observan en las imágenes de resonancia magnética de los pacientes con esclerosis múltiple y que contribuyen al diagnóstico de la enfermedad.
Puede interesarte: ¿Cuál es la mejor dieta para pacientes con esclerosis múltiple?
Con la desmielinización progresiva de los nervios, la transmisión nerviosa se altera tanto en el cerebro como en la médula espinal, y aparecen los diferentes síntomas de la esclerosis múltiple, desde la falta de coordinación motriz a la dificultad para mover las extremidades y los problemas cognitivos.
La desmielinización funciona como un marcador de la progresión de la enfermedad. Cuanto más lesiones por desmielinización se observan, más avanzada se encuentra la esclerosis múltiple.
El objetivo de muchos tratamientos es, precisamente, reparar la mielina que recubre a los nervios, ya sea estimulando la producción de nuevos oligodendrocitos, ya sea frenando la inflamación que genera el organismo contra sí mismo (autoinmunidad).
Ensayo clínico para personas diagnosticadas con esclerosis múltiple
Pacientes diagnosticados con Esclerosis Múltiple pueden postularse para participar sin costo de un estudio científico (conocido como ensayo clínico), que busca comprobar la eficacia de un nuevo tratamiento, llamado fenebrutinib, que podría retardar los síntomas y controlar la progresión de la enfermedad.
Si te gustaría obtener más información acerca de este estudio científico, solo debes llenar un breve formulario para que podamos ponernos en contacto contigo.
Ensayo clínico para personas con esclerosis múltiple
Completa el formulario para ponerte en contacto con un investigador médico
