Descubre los últimos avances en inmunoterapia para el tratamiento del cáncer de hígado. Conoce cómo estos nuevos enfoques están ofreciendo una nueva oportunidad a pacientes con carcinoma hepatocelular, mejorando su calidad de vida y aumentando las tasas de supervivencia.
El cáncer de hígado es el sexto cáncer más común en el mundo, y la mayoría de los casos corresponden a carcinoma hepatocelular (CHC), una forma agresiva que representa el 85-90% de los tumores hepáticos. El CHC suele estar asociado a enfermedades hepáticas crónicas, como cirrosis y hepatitis viral (hepatitis B y C), factores que complican el tratamiento y su detección temprana.
Inmunoterapia: ¿Cómo funciona en el cáncer de hígado?
La inmunoterapia busca activar el sistema inmunológico del paciente para atacar las células cancerosas. A diferencia de tratamientos convencionales como la quimioterapia, que daña tanto células sanas como malignas, la inmunoterapia actúa de manera específica sobre las células tumorales. En el cáncer de hígado, se han probado con éxito inhibidores de puntos de control inmunológico (anticuerpos monoclonales) que bloquean proteínas que las células cancerosas utilizan para esconderse del sistema inmune, como PD-1 y CTLA-4.
Algunos ejemplos de medicamentos inmunoterapéuticos son:
- Nivolumab (Opdivo): Este anticuerpo bloquea el receptor PD-1, que se encuentra en las células T, permitiéndoles atacar las células cancerosas en el hígado. Estudios recientes han mostrado que nivolumab tiene efectos positivos en pacientes con CHC avanzado, con mejoras en la tasa de supervivencia y en la reducción del tumor en algunos casos.
- Pembrolizumab (Keytruda): Similar a nivolumab, este medicamento también actúa sobre el receptor PD-1 y se utiliza en pacientes con CHC avanzado. En ensayos clínicos, pembrolizumab ha demostrado mejorar el control del tumor en casos donde otros tratamientos han fallado.
La eficacia de las investigaciones para cáncer de hígado
Ensayos clínicos recientes han explorado la combinación de inmunoterapia con otros tratamientos, como los inhibidores de angiogénesis (que limitan el suministro de sangre a los tumores) y la radioterapia. Por ejemplo, el estudio IMbrave150, que combinó atezolizumab (otro inmunoterapéutico) con bevacizumab (inhibidor de angiogénesis), mostró que esta combinación aumentó significativamente la supervivencia en pacientes con CHC avanzado.
Con el avance en la investigación de biomarcadores y terapias personalizadas, los científicos esperan hacer que los tratamientos sean aún más eficaces y específicos para cada paciente. La combinación de inmunoterapia con terapias dirigidas está en constante desarrollo y podría revolucionar el tratamiento del cáncer de hígado en los próximos años.
De igual forma, es fundamental que los pacientes consulten con su médico y consideren su estado general de salud antes de iniciar cualquier tratamiento.
Bibliografía
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- Vogel, A., & Martinelli, E. (2021). Updated Treatment Landscape for Hepatocellular Carcinoma: Novel Immunotherapeutic Options. European Journal of Cancer, 151, 35-43.